Y SI… hacemos un ejercicio de combinar diferentes tradiciones como la Numerología o la Cábala con el Eneagrama. Por ejemplo con  la suma cabalística tenemos que:

 2017 = 2+0+1+7= 10 -> 1+0=1

Por lo tanto esa suma reductora nos da el UNO.

¿Qué puede significar el Uno bajo el punto de vista del Eneagrama acerca de las necesidades personales?

El 1 es la Identidad, es decir si multiplicamos cualquier número por 1 nos da el mismo, al igual que si lo dividimos. Por tanto es como nuestro ADN, nuestro nombre.

Lo primero que deseamos tener en un NOMBRE para ser nombrados, para distinguirnos, para ser escuchados… para girar la cabeza cada vez que lo escuchamos pronunciar.

Imagina que tus padres no te han reconocido como hijo… ¡No es tan sencillo como parece! O que tu proyecto que creías propio y buenísimo, te lo han copiado y ya no eres el titular.

Esa IDENTIDAD implica reconocimiento en el sentido de ser reconocido entre otros, no pasar desapercibido o ser como del montón. A todos nos gusta que recuerden nuestro nombre tras una presentación en grupo, o que nos saluden por nuestro nombre propio en la empresa.

Sin embargo también lleva consigo el RESPETO, respeto por nuestras propias creencias y opiniones, por nuestras tradiciones, por nuestros títulos. Por ejemplo, imagina que tienes una carrera en un país y vas a otro y no te la convalidan… No existe de nuevo ese reconocimiento –no en el sentido de mérito-.

Estas situaciones suelen acarrear frustraciones, críticas, impaciencias que no dejan de ser una ira reprimida o enfocada hacia dentro, aspectos de personalidad a los que UNOS del Eneagrama son especialmente vulnerables.

Con la VISIÓN del Eneatipo UNO cuando está maduro, nos podríamos plantear ciertos trabajos para este año como…

• ¿Qué papel  principal voy a desempeñar este año?

• ¿Qué situaciones me producen frustración?

• ¿Soy sensible a las críticas?… ¿Qué me molesta de ellas?

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Por último… rellena la frase:

Necesito tener paciencia para_____________

Feliz Año UNO